Las sociedades están comprometidas y encaminadas a construir entornos con una mayor dignidad humana. La información actual nos permite señalar que somos las personas que más tiempo de expectativa de vida tenemos en toda la historia de la humanidad. Los cambios poblacionales conducen a que las sociedades del futuro se han transformado respecto a lo que conocíamos, en donde cada vez es más frecuente encontrar personas mayores; las sociedades deben adaptarse a la nueva organización de la población.
La construcción de sociedades comprometidas con la dignidad humana, radica en garantizar los derechos humanos universales, que permitan a todas las personas desarrollarse al mayor nivel humano posible. Actualmente desde un escenario de cooperación internacional, se han adelantado instrumentos que enuncian rutas de acción para que las sociedades en sus conjunto y los grupos específicos alcancen el desarrollo; y con ello el mayor nivel de bienestar.